05/04/2019
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El lloro de la vid

Sí, como lo oyes. Ahora mismo, con la llegada de la primavera, todas nuestras viñas se ponen a llorar. Pero tranquilo, no es de pena, más bien todo lo contrario. Te vamos a contar por qué.

En invierno, el frío paraliza todas las funciones de la vid. No tiene hojas, flores ni frutos. Su única función durante esos días es aguardar a que llegue la primavera y someterse a su poda, si quieres conocer los motivos de esta tarea te recomendamos que leas este post.

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Durante su parada invernal, la vid tiene que sobrevivir y prepararse para la primera. Es a principios de marzo, cuando el clima se va suavizando y las temperaturas medias se quedan entre 9 y 10 ºC, el momento en el que la vid vuelve a despertar.

Gracias al calentamiento del suelo, las hormonas contenidas en las raíces vuelven a activar el metabolismo de la planta. La cepa sale de su letargo y comienza una nueva añada.

También es entonces cuando la vid comienza a llorar. Esta expresión da nombre al proceso por el cual el flujo de la savia, que esta congelada, se dirige desde la raíces de la planta hasta sus partes más superficiales. En ese momento se puede observar cómo los cortes de la poda y las heridas del tronco y de los brazos se llenan de unas gotas transparentes que recuerdan a las lágrimas, por eso este proceso tiene un nombre tan poético.

La cantidad de lloro de cada cepa es variable, depende de la época en la que se haya realizado la poda, el grosos de los cortes, el vigor de la planta y los factores climáticos. Los lloros cesan cuando cada una de las “heridas de la vid” quedan cubiertas por unas sustancias gomosas producidas por bacterias que viven en el derrame y sales disueltas en el lloro evaporado que van obturando los vasos leñosos.

El punto final de este proceso llega cuando la vid comienza a florecer. Ese momento en el que las temperaturas diurnas aumentan, los contrastes con la noche desaparecen y la planta vuelve a la vida.

Añadir link del post “Objetivos y principios generales de la poda”, no te puedo poner el hipervínculo porque aún no esta subido

1 thought on “El lloro de la vid”

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