En pleno corazón de Requena, en una calle cargada de historia, La Contraria, vinos y libros se ha convertido en un espacio único donde la tradición y la innovación se dan la mano. Fundada por Elena García, esta tienda abrió sus puertas en octubre como un lugar de encuentro para quienes buscan disfrutar de buenos vinos, descubrir libros únicos y conectar con experiencias culturales. Ahora, junto a Álvaro Ibáñez, de la editorial Creaciones Alalimón, presentan “El Aguilando”, un proyecto que reivindica el valor de las tradiciones locales y su riqueza cultural.
Rescatando la magia del Aguilando
“El Aguilando” es una propuesta que combina diseño, sabor y memoria. “Queríamos recuperar algo tan nuestro como el Aguilando, una costumbre que prácticamente ha desaparecido en nuestra comarca”, explica Elena. La caja incluye el libro “A la una andaba la mula” de Francisco Arroyo, una libreta ilustrada en papel reciclado por Peregrini, almendras marconas locales, una recopilación de letras de aguilandos tradicionales y vino de la DO Utiel-Requena. Además, incorpora un código QR que da acceso a grabaciones históricas de Fermín Pardo, quien en los años 70 y 80 documentó canciones populares de la región.
La selección de vinos es un homenaje a la diversidad y riqueza de la DO Utiel-Requena. Incluye un tinto de Vinos y Sabores Ecológicos, elaborado por María Ángeles Novella, enóloga y viticultora de La Portera, reconocida por su compromiso con las técnicas tradicionales y la sostenibilidad. Además, el blanco y el rosado seleccionados son de Coviñas, cooperativa que representa a más de 3.000 familias de la comarca. “Elegimos Coviñas porque, al final, somos todos. Reúnen a tantas familias que forman parte del tejido vitivinícola de esta tierra, y eso es algo que queríamos reflejar”, comenta Elena.
Álvaro Ibáñez, desde su experiencia en Creaciones Alalimón, aporta una perspectiva cultural y literaria al proyecto. “El libro “A la una andaba la mula” recoge las canciones, juegos y tradiciones de la comarca, y eso es precisamente lo que queremos hacer: dar valor a lo que tenemos cerca. Gracias a las grabaciones de Fermín Pardo, podemos escuchar cómo cantaban nuestros abuelos y sentirnos conectados con nuestra historia. Es devolverle a la Navidad un carácter auténtico y comunitario”, señala Álvaro.
El aguilando o aguinaldo no solo celebra las raíces culturales de la comarca, sino que también busca darles visibilidad en un formato accesible y atractivo.
La Contraria: más que una tienda
Desde su apertura, La Contraria se ha convertido en un rincón especial para amantes del vino, los libros y las experiencias diferentes. Elena la define como “un salón de casa abierto al público”, donde los clientes pueden disfrutar de una copa de vino mientras hojean novelas gráficas, ediciones especiales o clásicos.
La selección de vinos refleja la filosofía de la tienda: respeto por el medio ambiente, microbodegas y elaboraciones tradicionales. “Me encanta abrir botellas nuevas, descubrir sabores y compartir esa experiencia con quienes nos visitan”, explica Elena. Además, el espacio ha albergado catas, talleres de grabado y charlas sobre temas como el vino natural o la viticultura biodinámica.
En cuanto a los libros, Elena selecciona títulos que no se encuentran fácilmente en otras librerías. La tienda apuesta por obras que invitan a la reflexión y al descubrimiento. “La gente viene buscando algo diferente, y eso es precisamente lo que quiero ofrecer”, añade.
El legado de La Soca
Más allá de La Contraria, Elena trabaja en La Soca, un proyecto dedicado a la recuperación de prácticas vitícolas tradicionales en La Portera, su pueblo natal. Junto a Pablo, María Ángeles Novella y otros colaboradores, esta iniciativa busca formar a jóvenes en técnicas como la poda, la vendimia y el manejo sostenible de viñedos.
“El conocimiento que generaciones anteriores han acumulado está en peligro de desaparecer. Con La Soca queremos evitar que eso pase y, además, reconectar a los jóvenes con el disfrute de trabajar la tierra”, comenta Elena.
Tradición e innovación: un camino compartido
Con proyectos como El Aguinaldo, La Contraria, Elena García y Creaciones Alalimón, Álvaro Ibáñez están construyendo un puente entre el pasado y el presente. En cada botella de vino, cada libro y cada actividad, resalta el espíritu de preservar las raíces culturales y compartirlas con nuevas generaciones.
“No se trata solo de rescatar tradiciones, sino de disfrutarlas y hacer que otros también lo hagan”, concluye Elena. En La Contraria, tradición y modernidad se fusionan, creando un espacio que invita a redescubrir el valor de las cosas simples y auténticas.